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martes, 26 de agosto de 2014

1973


La crisis del petróleo de 1973 (también conocida como primera crisis del petróleo) comenzó el 23 de agosto de 1973, a raíz de la decisión de la Organización de Países Árabes Exportadores de Petróleo (que agrupaba a los países árabes miembros de la OPEP más Egipto, Siria y Túnez) con miembros del golfo pérsico de la OPEP (lo que incluía a Irán) de no exportar más petróleo a los países que habían apoyado a Israel durante la guerra del Yom Kippur (llamada así por la fecha conmemorativa judía Yom Kipur), que enfrentaba a Israel con Siria y Egipto. Esta medida incluía a Estados Unidos y a sus aliados de Europa Occidental.


Hoy en día vivimos en un mundo absolutamente cambiado a mucho peor, en un mundo con  una economía lastrada por un parasitismo social musulmán que se niega a integrarse en nuestra civilización humanista occidental pero que se niega también a vivir fuera de los sistemas de ayudas sociales, y mantiene un índice de natalidad disparado.

No se trata de que en Occidente el capitalismo haya degenerado hacia una de sus versiones más salvajes, en absoluto. Se trata de que unas arcas públicas ávidas de ingresos para poder afrontar todos los gastos derivados de ese parasitismo se han visto obligados a aumentar la carga impositiva en todos aquellos que conforman el tejido industrial occidental (empresarios y trabajadores) hasta el extremo de haber contraído la capacidad de crecimiento.

Para estimular ese crecimiento, torpes gobiernos (entre los que figura de manera preponderante el español), no han encontrado mejor vía que la supresión de derechos laborales y de derechos sociales a los ciudadanos que sí que se encuentran integrados dentro del sistema productivo.

¿Cuándo se originó esta crisis tan brutal? No fue en el año 2008… ese fue simplemente la explosión de una burbuja cuyo origen estuvo en el año 2005. Cuando el Banco Central Europeo, en el deseo de controlar su inflación, inició una desmesurada y alocada subida de intereses que afectó a la totalidad de las familias. Familias que como consecuencia de ese aumento de intereses vio cómo sus ingresos mermaban enormemente, produciéndose una contracción del consumo que supuso el enfriamiento de una economía que se encontraba recalentada.

Fue exactamente lo mismo que sucede con un globo aerostático… el enfriamiento del aire en su interior provoca que éste baje. Los gobiernos empezaron a tirar sacos de arena, aplicando gastos en formación de los desempleados, ayudas al empleo, ayudas sociales por desempleo, pero ese globo seguía descendiendo.

Fue en el año 2008 cuando ya empezó a derrumbarse el castillo de naipes que constituye la economía. Y en todo el mundo occidental las familias, endeudadas hasta los ojos, empezaron a faltar a sus compromisos de pagos, en especial las hipotecas de sus viviendas. Cuando miles de empresas, faltas de ventas por la ausencia de consumo, empezaron a cerrar, dejando impagados los créditos concedidos por la banca. Cuando esta se empezó a encontrar con un aluvión de viviendas que eran imposibles de revender ante la ausencia de activo circulante y ante la dudosa solvencia de muchos de los que deseaban adquirirlas.

Fue tras un par de años de caída libre cuando los gobiernos vieron que la única manera de detener al globo en su caída era recalentando el aire en su interior. Cuando decidieron abrir la espita de la bombona de gas para que éste globo reiniciase su ascenso. Y fue entonces cuando nuevamente se inició una progresiva rebaja de intereses que nuevamente situó los gastos familiares en un nivel asumible.

Pero ya era tarde. Millones de familias habían caído del globo. Millones de personas quedaron sin empleo. Los bancos precisaron de monumentales fortunas cedidas por los gobiernos que jamás podrán ser recuperadas y que supuso que los mismos ciudadanos adquiriesen una deuda indirecta de proporciones descomunales.

Occidente, hoy en día, está en quiebra.

Y una sociedad en quiebra es caldo de cultivo para los extremismos suicidas.  En Europa la extrema derecha y en España la extrema izquierda están en un disparatado auge. Formaciones que han sabido enganchar sus riendas a una manada de personas desesperadas y sin criterio político ni económico poco a poco se van adueñando de los puestos claves de control de sus sociedades.

La operación iniciada en 1973 por el mundo árabe para destruir las sociedades occidentales, ha triunfado. A falta de su última victoria, que es exterminar hasta el último resto de nuestra civilización, imponiéndonos una religión musulmana que no es religión, sino sistema político de dominio totalitario y anti humanista.

Viene perfectamente al caso en estos momentos finales, tener muy en cuenta las palabras recogidas de Sandra Ben Hillel (desconozco si de ella es su autoría) en las que se muestra el estado actual de nuestras sociedades y de la ceguera de aquellos que día a día se erigen en paladines de la libertad y de la razón. Paladines que no lo son en absoluto de esos principios, sino del absolutismo ideológico, la intransigencia y el fanatismo.


OYE TÚ, ANTISEMITA (SANDRA BEN HILLEL)
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Oye tú, antisemita. 

Te estoy hablando a ti. Y a ti también, que te consideras una “persona de buena voluntad”

Y que horrorizado por las fotos que publican de algunos niños muertos en Gaza nos estás condenando día a día.

¿Cuándo vas a despertar y darte cuenta que nosotros somos solo un señuelo para desviar tu atención de lo que realmente sucede?

Mientras el Islam fanático te llena la cabeza de propaganda antisemita, jugando con tu natural antisemitismo del cual no tenías idea, está muy radicado en el fondo de ti mismo, ellos hacen y deshacen en el mundo a su gusto y tú muy ocupado en condenar el militarismo, el capitalismo, el sionismo, el judaísmo, el… y todos los ismo que se te ocurren, ellos pueden hacer lo inconcebible sin que tú digas ni una palabra.

Seguramente eres cristiano, es lo más probable.

Y sales a la calle a manifestar y defender al islam fanático y extremista, contra el monstruo sionista, judío israelí o lo que sea.

Pero no eres más que un juguete en manos de los yihadistas y los hamases y otros de esas especies.

Tú con tu complejo de superioridad sales a defender a los desvalidos fanáticos musulmanes, aquellos que te consideran poco menos que un perro… ¿Quien te dijo que son pobrecitos y desvalidos?

Primero que nada… son millonarios. Y de tarados no tienen ni un pelo.

Su sistema de propaganda es uno de los mejores del mundo, te muestran un montón de fotos y te crees todo lo que ves, sin averiguar de dónde salieron las fotos y quienes son las victimas.

Y mientras tanto… pasa todo esto:

Ellos masacran a miles de cristianos en todo el mundo musulmán… y tú callas.
Ellos queman pueblos enteros de cristianos… y tú callas.
Ellos lapidan mujeres en todo el mundo musulmán… y tú callas.
Ellos raptan nenas cristianas, las violan y a las que sobreviven las venden como esclavas… y tú callas.
Ellos queman vivos o ahorcan a los homosexuales en todo el mundo musulmán… y tú callas.
Ellos azotan públicamente a personas que fueron vistas comer durante el ramadán… y tú callas . 
Ellos matan a las nenas pequeñas que han sido violentadas para limpiar el honor de la familia aunque solo tengan 10 años de edad… y tú callas.
Ellos decretan la infibulación (mutilación genital) para todas las mujeres desde recién nacidas y hasta los 45 años en Iraq… y tú callas.
Ellos decretan que se puede un hombre casar con una bebé recién nacida y disfrutar sexualmente de ella esperando hasta los 9 años para tener una relación completa con ella… y tú callas.
Ellos decretan y practican muchas otras barbaridades, que por pudor personal no puedo seguir mencionando… y tú callas.


Los has visto en Siria comiendo el corazón de sus enemigos frente a las cámaras de la televisión… y tú callas.
Los has visto jugar fútbol con las cabezas de sus enemigos… y tú callas.
Les has visto cortar las manos de niños pequeños por robar un pan… y tú callas.
Les has visto enviar a sus hijos cargados de explosivos para matar enemigos… y tú callas.
Les has visto matar a niños pequeños con un tiro en la cabeza… y tú callas.
Les has visto sepultar niños vivos por el solo pecado de ser cristianos… y tú callas.
Años atrás (en Ramallah) los vimos matar a 3 soldados israelíes dos judíos uno árabe y mostrar sus manos y sus bocas ensangrentadas con orgullo y tú callaste.

Estás tan embebido de odio antisemita que no ves lo que pasa contra tu propia gente, contra tus correligionarios cristianos… ¿Qué excusa tienes? cÓmo te justificas?  ¿La sangre musulmana vale más que la sangre de tu propia gente?

No digo que me defiendas a mí… ¡¡Pero tampoco defiendes a tu gente!!

Defiendes la barbarie!!

No ves cómo se van apoderando de Europa, Sudamérica?
No ves que ya ni siquiera eres capaz de razonar por ti mismo?
No ves que no haces más que repetir como un loro todas las acusaciones contra Israel y los sionistas?
No ves que eres tú mismo el que le estás abriendo las puertas del mundo occidental?

Y no me vengas con el cuento de los pobres prófugos palestinos, son los únicos en el mundo que rechazados por TODOS los países árabes sirven solo como carne de cañón.

Ellos no son nuestras víctimas, son víctimas del islam fanático

Y mientras tanto, nosotros los judíos… somos los únicos en el mundo que les damos asistencia médica gratuita.
Somos los únicos que les entramos todos los días toneladas de alimentos, para que puedan comer, mientras sus jefes se dan la gran vida en hoteles de lujo.

Sin embargo nunca hemos instrumentalizado nuestra ayuda humanitaria.
Y sabes por qué?
Porque no somos la porquería que te vende la propaganda antisemita.
Porque somos nosotros y algunos pocos amigos verdaderos los únicos que conservamos la moral y la ética en este mundo.

¿Que harás cuando vengan por ti?  ¿Que harás cuando vengan por tu hija? o por tu nieta?
¿Les darás las gracias porque han liberado el mundo de los judíos?

Pero como esto no sucederá porque somos eternos

Entonces pedirás nuestra ayuda, como la pide hoy la población de Gaza, rehenes de Hamas.

Pero piénsalo un poco… ¿estás seguro que te ayudaremos? ¿Crees que te lo mereces?

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