Un mes después de que se desatara el conflicto más serio que ha vivido México estos últimos años, el presidente Enrique Peña Nieto (PRI) pisó territorio en crisis -entre enormes medidas de seguridad- y llegó a Michoacán.
Quería ver personalmente la puesta en marcha de su plan de seguridad después de ver como el polvorín en la región de 'Tierra Caliente' saltaba por los aires tras el levantamiento de grupos de Autodefensa, que han ido expulsando a tiro limpio al cártel de los Caballeros Templarios amos y señores hasta ahora de la zona.
Tres semanas después del despliegue de fuerzas federales en Michoacán, el gobierno mexicano indicó que con una inversión de 45,500 millones de pesos (unos 3,400 millones de dólares) durante 2014 se impulsará el desarrollo económico y social de la entidad, afectada desde principios del año pasado por la violencia derivada de la acción del crimen y sus enfrentamientos con autodefensas.
El apoyo se distribuirá en cinco ejes que compondrán la segunda fase de la intervención federal en Michoacán, enfocada al “desarrollo integral" de la entidad.
Una primera etapa se centró en el control territorial por parte del Estado mexicano, detallaron este martes el mandatario Enrique Peña Nieto y otros integrantes de su gabinete, en un evento en Morelia, capital michoacana.
Los cinco ejes anunciados para la estrategia son:
1.- Economía familiar y empleos.
2.- Educación y cultura para la prosperidad.
3.- Infraestructura moderna y vivienda digna.
4.- Salud y seguridad social.
5.- Desarrollo social y sustentabilidad.
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