Escenarios posibles:
Malo: es el sostenido por Lapid, ministro israelí de Finanzas. Europa absorbe un 32% de las exports de israel . Una reducción de un mínimo de 20% de ventas a Europa haría bajar los ingresos al 6% a las empresas israelís. Consecuencias: despidos y cierres .
Regular: el boicot se aplica por empresas privadas , no por gobiernos. Es poco probable un boicot a los productos israelís similar al de la Liga Árabe. Las firmas internacionales tienen multitud de lazos con Israel materializados en inversiones, investigación y producción ; no perderán sus contratos sin oponerse. La misma Europa no puede ir contra sus intereses perdiendo los contactos económicos do Israel.
Bueno: el boicot produce un pánico en los inversores.Se deshacen del shekel y compran dólares , el dólar sube por ej. de 3,5 a 3, 85 shekels , la cifra de exports israelís sube entonces permitiendo compensar una pérdida -producida por el boicot- de un 6% aproximadamente. Se justificaría entonces la compra actual de dólares por el Banco de Israel, los billetes verdes acumulados permitirán - si llega el caso- contener una subida muy fuerte del dólar cara al shekel.
Malo: es el sostenido por Lapid, ministro israelí de Finanzas. Europa absorbe un 32% de las exports de israel . Una reducción de un mínimo de 20% de ventas a Europa haría bajar los ingresos al 6% a las empresas israelís. Consecuencias: despidos y cierres .
Regular: el boicot se aplica por empresas privadas , no por gobiernos. Es poco probable un boicot a los productos israelís similar al de la Liga Árabe. Las firmas internacionales tienen multitud de lazos con Israel materializados en inversiones, investigación y producción ; no perderán sus contratos sin oponerse. La misma Europa no puede ir contra sus intereses perdiendo los contactos económicos do Israel.
Bueno: el boicot produce un pánico en los inversores.Se deshacen del shekel y compran dólares , el dólar sube por ej. de 3,5 a 3, 85 shekels , la cifra de exports israelís sube entonces permitiendo compensar una pérdida -producida por el boicot- de un 6% aproximadamente. Se justificaría entonces la compra actual de dólares por el Banco de Israel, los billetes verdes acumulados permitirán - si llega el caso- contener una subida muy fuerte del dólar cara al shekel.
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