Tras el destape, el 17 de diciembre pasado, de varios escándalos de corrupción que salpican al entorno del primer ministro Tayyip Erdogan, el premier ha lanzado una amplia ofensiva no sólo para bloquear las investigaciones, sino también para anular las funciones de todo aquél elemento que considere infiel. Los más afectados están en la Policía y la Judicatura, lo que está generando preocupación por las injerencias políticas en la Justicia.
Los intentos de Erdogan de pergeñar diques de contención para evitar acabar inundado por la corrupción se extienden al poder judicial. La oposición ha tachado los acontecimientos de "golpe de estado civil"."Estáis protegiendo a los ladrones", criticó ayer a su propia formación el diputado Muhammed Çetin a la par que anunciaba el abandono del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) de Erdogan.
Los intentos de Erdogan de pergeñar diques de contención para evitar acabar inundado por la corrupción se extienden al poder judicial. La oposición ha tachado los acontecimientos de "golpe de estado civil"."Estáis protegiendo a los ladrones", criticó ayer a su propia formación el diputado Muhammed Çetin a la par que anunciaba el abandono del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) de Erdogan.
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