Esta hermosa imagen es la de Daniel Tragerman, hijo de Doron y Gila, dos judíos argentinos residentes en el kibutz Nachal Oz.
Un niño que ya no podrá superar en altura la pequeña pila de piezas de juguete que en la foto muestra ufano por haberla montado él solito en un momento en el que era feliz. Posiblemente, por la expresión de su carita, muy feliz.
Un niño que teniendo sólo cinco segundos para alcanzar una ubicación segura, no lo logró y cayó víctima de esa violencia que practica Hamás y que apoya mucha gentuza en España y en el mundo entero.
Si Israel no hubiese hablado de paz en estas semanas anteriores con quien sólo desea el camino de la guerra, amparado en el apoyo de una ciega opinión pública occidental (sobre todo española), si Israel hubiese desoído las amenazas de la islamófila ONU o del musulmán Obama, este niño estaría vivo.
Y sinceramente prefiero mil veces a que el vivo sea Daniel antes que el niño enfermo mental que ha creado en su ceguera sanguinaria el monstruo de Hamás...
Hamás ya estableció el tipo de cambio entre una vida judía y una vida palestina, cuando liberó a Gilad Shalit en 2011... un judío equivale a 1027 palestinos.
Por lo tanto aún llevamos unos 500 niños muertos. Aún quedan otros tantos para alcanzar ese tipo de cambio fijado por Hamás en su momento.
Israel debe atacar fiera y demoledoramente todos los objetivos que considere necesarios. Tiene un crédito para que las muertes de niños (arma propagandística de Hamás) no supongan un obstáculo en su tarea.
ISRAEL DEBE DEJAR DE HABLAR DE PAZ CON QUIEN NO QUIERE MÁS QUE SU EXTERMINIO
Descanse en paz Daniel (Z"L) pero que su muerte sirva para algo.
Descansen en paz todos los niños y adultos inocentes que por parte palestina caigan en esta lucha por la paz y por la supervivencia de un pueblo que sólo aspira a vivir en paz, Israel.
Descansen en paz pese a que su elección hace años fue la del terrorismo, pese a que celebraron en momentos de euforia la muerte de inocentes israelíes. Pese a que hoy lamentan con llanto y crujir de dientes el merecido que están recibiendo.
Ha llegado el momento en el que para ser políticamente correcto hay que decir la verdad sin tapujos ni medias tintas.
Quien siembra vientos, recoge tempestades... quien a hierro mata, a hierro muere... tantos dichos que hay para que seamos conscientes de que nuestros actos siempre tiene consecuencias... dichos ignorados y despreciados por quienes hace poco más de dos meses se creían intocables.
ISRAEL DEBE GOLPEAR SIN CONSIDERACIÓN... ESTA NO ES POSIBLE
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