Un interesante e imparcial artículo acerca de una mafia llamada BDS que no deben dejar de leer.
COMENTARIO PREVIO (GEDEÓN98)
En colores resalto las tres oportunidades para alcanzar un acuerdo para lograr la paz que rechazaron los árabes "palestinos". Y en verde, las conclusiones más evidentes de la injusticia de esta nueva maniobra que está encontrando eco principalmente entre la juventud y quienes viven a costa de ofrecerles mentiras y falsas utopías con las que engordar sus arcas con interés puramente comercial.
Era mucho más digna la utopía de quienes en los 70/80, en nuestra juventud idealizante, apoyábamos regímenes como el castrista en Cuba. Al menos, Cuba en esos momentos se caracterizaba porque su principal exportación era la de médicos a Angola, y la cultura y la educación eran objetivos principales de un gobierno revolucionario sometido a un bloqueo por parte de Estados Unidos.
Pero hoy, el apoyo de nuestra juventud en el conflicto en Oriente Medio se centra en una defensa absoluta de la falsa identidad palestina, creada a partir de 1964, cuyos esfuerzos se concentran en la permisividad (cuando no apoyo explícito) de las actividades terroristas contra la población civil en Israel. Una falsa identidad representada por el gobierno de Mahmoud Abbas, personaje de manos manchadas con la sangre de innumerables víctimas civiles a quienes él mismo asesinó.
Un gobierno que descuida absolutamente el derecho a la sanidad de su población, que en infinidad de ocasiones debe pasar a Israel para ser tratados en sus hospitales. Que manipula las mentes de sus niños en las escuelas y que conduce a su juventud a una militarización agresiva y que niega el derecho a la identidad nacional e incluso el derecho a la vida a los habitantes de Israel.
¿Y ahora me grita rojo de ira y de odio que Israel es también un Estado militarizado? Pues claro que sí, cateto. Pero lo que jamás podrán discutirme es que su militarización obedece exclusivamente a fines defensivos. Y eso, en mi pueblo y en todo el mundo, es algo no sólo justo, sino noble y digno.
En fin... sigan leyendo, por favor. No les defraudará.
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