Enrique Chia ha sido siempre un hombre atrapado entre su pasión por la ciencia y la música. Para Chia el amor por la música comenzó siendo un niño en Cienfuegos, «una muy bella ciudad en la costa sur de Cuba. En la noche solia ver la bahía cubierta con poco puntos de luz de los pescadores, al igual que las miles de luciérnagas. Por ejemplo, tiene una canción, Luna cienfueguera, que se inspiró en esta hermosa vista. »
En estas veladas, Chia escuchaba con su familia como su madre tocaba el piano. Pronto comenzó a picotear en las teclas, y por los cinco años de edad, su madre comenzó a ver el interés y el talento creciente del chico. Estudió piano en su natal Cienfuegos con el Maestro José Manuel Vázquez, del Conservatorio de Música de La Habana. La madre de Chia también inculcó en él una creencia de que la música era para placer personal, y no para ganarse la vida. Así, en 1961, cuando el clima político está cambiando en Cuba, Chia salió de casa para asistir a la universidad en Georgia Tech, donde más tarde obtuvo su maestría y doctorado en metalurgia.
En 1968 se casó con Diana Beguiristain. Establecieron su hogar en Carrollton, Georgia, donde crecieron sus dos hijas, Laura y Lisa. Chia solamente tocaba el piano en las pequeñas reuniones de trabajo, mientras ejercia la labor como profesor adjunto en el departamento de ingeniería de materiales en el Southwire Sociedad y Tecnología. En 1986 fue seleccionado para una especial posición en la facultad del Georgia Tech, el Instituto de Investigación para trabajar con la industria privada en la mejora de los metales y técnicas de procesamiento. En 1990 fue nombrado Vicepresidente Ejecutivo y Gerente de Operaciones de American Wire Bellas, Empresa de desarrrollo de componentes de ordenador hasta 1996. Se le han concedido 46 patentes de EE.UU. por su trabajo de investigación.
Para Enrique Chia la música fue privada hasta que grabó un cassette ante la insistencia de su suegro, el doctor Rodolfo Beguiristain, que hizo copias para la familia y amigos. La cinta fue conocida en una tienda en Miami y su música fue tan bien recibida por el público, que comenzó a seguir sus grabaciones. Varios de sus CDs incluyen la participación del maestro bajista Israel López «Cachao». También ha destacado flautista Néstor Torres, y leyendas como Olga Guillot y Libertad Lamarque, quien cantó acompañada por el piano de Chia en su última grabación vocal.
El Maestro Chia tiene un total de 42 CDs grabados hasta la fecha, que incluyen románticos boleros, tangos, tropical tradicional, la Navidad, la música de inspiración y dos conjuntos de éxitos internacionales de la música americana. Varias de sus colecciones han sido vendidas para redes nacionales de televisión, como CNN, Headline News, TNT, Univision y Telemundo.
El Maestro Chia ahora realiza regularmente conciertos en los Estados Unidos y América Latina. Ha actuado internacionalmente, en países como Mexico, Puerto Rico, República Dominicana, Panamá, Costa Rica, Venezuela y Perú.
Enrique Chia ha recibido numerosas felicitaciones y elogios. Más recientemente recibió el prestigioso Premio Casandra Internacional en la República Dominicana y una nominación para un Premio Grammy por su grabación de «La Música de Ernesto Lecuona.» Su magistral interpretación continuar alcanzando gran audiencia de todo el mundo con sentimiento y emoción.
FUENTE TEXTO: http://www.lastfm.es/
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